Twisted Arrows es uno de esos juegos que pueden mantenernos durante horas estrujándonos los sesos para completar un nivel o conseguir que perdamos la paciencia y nos entren ganas de estrellar nuestro teléfono o tablet contra el suelo. Se trata de un juego de puzzle para Android de los complicados.
El objetivo del juego es tan sencillo como conducir nuestra bola desde la salida hasta el punto final. Para ello, debemos ir pasando la bola de una plataforma a otra sin caer. La mecánica se apoya sobre dos reglas básicas: La primera de ellas es que cada casilla tiene una o varias flechas que indican los posibles sentidos de salida de la misma. ¿Qué fácil, no?. Ir de un punto a otro siguiendo el camino marcado por flechas en las casillas... Pues no, porque (y ésta es la segunda regla), cada vez que caemos sobre una casilla, ésta gira haciendo que las flechas apunten en direcciones diferentes. La ventaja es que el giro de la casilla no es aleatorio, sino que se realiza dependiendo del color de cada una, de manera que podemos prever hacia dónde apuntarán las flechas una vez entremos en cada casilla. De esta forma, los bloques verdes giran 90 grados, los amarillos 180, los azules 270 y los naranjas no giran, permaneciendo siempre en la misma posición.
Llegados a este punto, ya os habréis hecho una idea de lo complicados que pueden llegar a ser los niveles. El juego resulta muy entretenido, con una curva de dificultad que logra engancharnos al principio, pero que realmente resulta un desafío para nuestras neuronas a menudo que vayamos avanzando. Los niveles más complicados nos obligarán a parar y diseñar una estrategia de avance, ya que lanzarse a la piscina suele terminar con nuestra bola cayendo al vacío, a no ser que tengamos mucha suerte.
Twisted Arrows puede descargarse de forma gratuita de Android Market y realmente merece la pena probarlo, sobre todo a los que gusten de puzzles complicados.
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