Cuando alguien llega de primeras a un nuevo sistema, una de las primeras cosas por las que suele preguntarse es por la cantidad y la calidad de herramientas ofimáticas que tiene a su disposición. La verdad es que aún hay muchas lagunas en Chrome en este aspecto. Google Docs cubre algunas necesidades muy básicas, pero en ocasionas necesitamos hacer cosas más complejas.
Hasta ahora pensaba que OfficeApps me ofrecía todo lo que podía necesitar para el tratamiento de documentos de Office en Chrome, y en realidad es así, puesto que en mi caso, las funciones que utilizo en casa se reducen casi exclusivamente a la visualización. Sin embargo, no todos tenemos las mismas necesidades, y muchos usuarios requieren herramientas más avanzadas con posibilidades que OfficeApps no puede dar.
SlideRocket es una herramienta de creación y edición de presentaciones o slideshows de una potencia realmente sorprendente teniendo en cuenta que estamos hablando de una plataforma web. El editor de diapositivas está realmente bien diseñado y cuenta con una amplia variedad de temas prediseñados, lo que facilita que usuarios noveles, como es mi caso, podamos conseguir unos acabados realmente buenos con poco esfuerzo. Los menús son muy intuitivos y aunque puedan despistar un poco al principio al usuario acostumbrado a PowerPoint, tras un rato de uso el manejo de la herramienta se muestra mucho más intuitivo que el de la aplicación de Microsoft.
SlideRocket permite por supuesto incluir una gran cantidad de efectos en las presentaciones, así como incrustar gráficos, música o vídeo. Incluye asimismo una interesante herramienta de comentarios, muy útil cuando varias personas trabajan online en un mismo proyecto.
La aplicación se presenta en dos modalidades. La versión Lite es gratuita y para uso no comercial, e incluye un conjunto básico de funcionalidades entre las que se cuentan las de publicación y trabajo colaborativo, así como la importación y exportación de presentaciones a otros formatos, como PPT (básico para movernos en el mundo real). Suficiente para casi cualquier usuario aficionado. La versión Pro, por su parte, pensada para un uso comercial, funciona mediante un sistema de suscripción, y aquí viene el problema: 24$ por usuario y mes (o 240$ por usuario y año) se antoja un precio demasiado elevado.
Por suerte, para los que no pensemos dar un uso profesional a la herramienta, nos sobrará con la versión Lite. Por último, comentar una pega importante: El modo presentación offline únicamente está disponible en la versión Pro.
Enlace a descarga de la aplicación en Chrome Web Store
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